El populismo tanto en su versión pseudo-socialista de bolsos y carteras de lujo, como en la más novelosa y popular moda anarco-capitalista ha hecho gala de una recurrente y peligrosa ignorancia en temas de extrema importancia tales como democracia, institucionalidad, desarrollo económico y desde luego también Sistemas de Salud.

En notas anteriores nos hemos referido a ciertas propuestas que ignorando las características de los Sistemas de Salud que funcionan eficientemente, colocaban la prioridad en el Hospital Público como eje de un nuevo sistema de salud popular.

Allá versión popular más moderna nos aporta ahora una serie de sobreestimadas afirmaciones sin sentido proponiendo: «descentralizar las derivaciones hospitalarias, arancelar todas las beneficios de salud y autogestionar el servicio de salud en trabajos compartidos con la salud privada», promotor leyes que permiten pactar honorarios entre los pacientes y profesionales médicos y «la creación de un seguro universal de salud que cubra los costos, cuidados preventivos, procedimientos de urgencia proporcional a la capacidad de pago del receptor del servicio»

La recomendable y ordenada complementación público-privada en el campo de la salud y la necesidad de instrumentar contratos que obligaciones específicas de las partes -también en la relación médico-paciente- ha sido el tema de nuestra columna anterior.

La ignorancia, el miedo y la ira dominan las propuestas políticas

Sin embargo a continuación del párrafo citado aparece un oximoron o «burrada» subrayó deliberadamente: un seguro universal de salud es aquel en que todas las personas y las comunidades tienen acceso equitativo a servicios integrales a lo largo del curso de vida, con calidad y sin dificultades financieras, es igualitario y nunca proporcional a la capacidad de pago del receptor del servicio.

Estudiosos del comportamiento como Kruger y Dunning (1999) (1) sugiere que las sobreestimaciones ocurren en parte, porque las personas que no están capacitadas en ciertos dominios sufren una doble carga: no solo uno ilegal conclusiones equivocadas y toman decisiones desafortunadas, sino que mi incompetencia les roba la capacidad metacognitiva para darse cuenta de ello.

Cualquiera que sea la incompetencia mayor del sujeto que sea consciente de ello y más positivamente se estará autovalorizando.

Hacia un plan estrategico para nuestro sistema de salud

Al igual que se estudia el desarrollo economico y sus procesos asociados, siempre es recomendable analizar en detalle los Sistemas de Salud del mundo que mejor y más eficientemente funcionan antes de sugerir sinsentidos.

A esta altura de los acontecimientos debemos representarnos también cómo es posible que estas propuestas estrafalarias logren concentrar tantas preferencias populares.

El populismo es una forma de polémica política en el que los «antisistema» movilizan al «pueblo» contra los «medios hegemónicos», las «élites corruptas» o la «casta política». Los populistas construyen una política división entre ellos y otros actores, a quienes deprecian como «élite» o «establecimiento» y los objetivos de los ataques reflejan esto al construir una política división compartiendo una plataforma común de orientaciones con las «personas decentes» versus los «otros».

Educación para un mundo de cambios disruptivos

Las emociones en los corazones y mentes de los ciudadanos son los ejes del accionar de los politicos populistas y sus seguidores, despertando el sentimiento generalizado contra la «traición» a sea lo que sea que estos actores presentan como el interés de la gente.

Las estrategias se han centrado en «tacticas del miedo» (to lose el empleo, the jubilation, the ayuda social, los servicios de salud) y las hoy más novedosas «tácticas que lograron canalizar la ira» (que se vaya toda la casta).

Segundo Friedrichs et al. (2) el miedo y la ira tienen puntos importantes en común: ambas son emociones negativas, es decir, las personas experimentan como desagradables (a diferencia de las emociones positivas como el entusiasmo o alegría).

tanto cansado personajes intrépidos ven cansado enfadadas suelen atribuir el origen de sus emociones a factores externos (fuera de ellos mismos).

El PROMEDIO, por un lado, inhibe la acción u ordena el escape hacia la seguridad («vuelo»). La ira por otro lado, invite a la action disruptiva para remover un obstáculo, por ejemplo confrontando al «enemigo» que ha causado el problema o interponiéndose en el camino de su solución («lucha»).

Para estos autores la interacción populista miedo-ira estuvo presente tanto en el referéndum del Brexit del Reino Unido de 2016, como en las elecciones presidenciales de Trump del mismo año.

Cambiar la mentalidad que une la mayoría aprovechó y comulgó con ella y que aún nos domina –el enano fascista según Feierstein–, requerirá de todos vosotros y de nuestro nosotros seguiremos estudiando y aprendiendo cada día para quizás lograr alguna vez superar nuestras limitaciones evidentes.

(1) Kruger, J. y Dunning, D. (1999). No calificado e inconsciente: cómo las dificultades para reconocer la propia incompetencia conducen a autoevaluaciones exageradas. Revista de personalidad y psicología social, 77(6), 1121–1134. https://doi.org/10.1037/0022-3514.77.6.1121
(2) Friedrichs J., Stoehr N., Formisano G. Concurso de miedo-ira: gobierno y política populista de la emoción (2022)

Tambien te puede interesar